356K de resistencia y determinación vivió Marian Schmid para conquistar la “Vuelta del Martín”, carrera de ciclismo que se desarrolló este fin de semana en la Región de Los Lagos.
“Fueron 19 hrs, 8 de ellas durante la noche, en boca de lobo. 80% del tiempo sola conmigo misma, pensando en los que quiero y agradecida de poder hacer esta Vuelta del Martín maravillosa, organizada por Liga Ratonneur.
Partimos en Frutillar, en Parque Lavanda Frutillar a las 10 AM rumbo a Llanquihue. Pasado Puerto Varas nos metimos por un camino al Parque Alerce Andino, donde estaba el PC1. Ahí sigo sola el resto de la carrera.
Se llegaba hasta la Carretera Austral (solo 100 mts) para rodear el río por el otro lado. Después de 140 km estaba de vuelta en el lago y faltaban 80 km para el PC2 en Cochamó, donde tenía dropbag con ropa seca que necesitaba urgente tras 10 hrs de tiempo variopinto, de llovizna y sol.
La llegada a Cochamó, con los colores rojizos del atardecer en el río y el mar, hacía olvidar los 220 km en el cuerpo.
Me tomé 50 min para entrar en calor, comer el primer Maruchán de mi vida, reponer geles, cargar radar y prepararme para la noche.
Salí a las 21 hrs., oscuro, sin luna ni estrellas ni luces en el camino. Las 8 hrs siguientes agradecí la luz que me prestaron porque iluminaba el camino y la señalización que mostraban por dónde era la cosa, ya que el Garmin solo lo veía si me equivocaba o si venía un auto.
Un silencio y una paz sobrecogedora fueron mis gregarios en el pedaleo por el bosque nativo y la ribera del lago, camino a Cascadas, donde estaba el último PC en el km 280. Caldito de pollo y sándwich jamón-queso reponedores. Powerbank a la luz delantera y rezar para que nada se apagara en las 4 hrs que quedaban.
Por fin llegó a Los Bajos, luego Frutillar y la subida al Parque Lavanda que había decidido subir caminando hace varias horas. Pero no se bajó. Llegando a la meta sintió un auto atrás y un “¡mamá!”, ella preciosa, compañera perfecta, que hasta quedó con ganas de pedalear.”